Después de esto abrió Job su boca, y maldijo su día. Y exclamó Job, y dijo: Perezca el día en que yo nací, Y la noche en que se dijo: Varón es concebido. Job 3:1-3
„A veces, la única forma en que el buen Señor puede entrar en algunos corazones es rompiéndolos.“ Venerable Fulton Sheen.